• Autor: Hernandez, Paulino

El joven piloto porteño cerró un año de aprendizaje y maduración junto al equipo Midas. Lograron alcanzar sus objetivos más allá de la ubicación final del torneo.

La temporada 2018 fue una clara etapa de maduración para el joven piloto Lucas Guerra. Junto al equipo Midas Racing transitaron toda una temporada con grandes desafíos y objetivos claros. Al final el balance es positiva más allá de no poder reflejar en la posición del campeonato.

El equipo dirigido por Sergio Rafaelli se trazó un plan de trabajo al inicio de la temporada, apostando a dos jóvenes talentos. Lucas Guerra y Juan Cruz Acosta. El trabajo fue creciendo y con el correr de las carreras se fueron viendo los resultados.

Para Lucas este fue un año de aprendizaje que no quedó reflejado en la posición final del torneo. “La realidad es que la posición final en el campeonato no refleja la realidad que vivimos durante la temporada. Hemos logrado ser protagonistas en la mayoría de las clasificaciones alcanzando uno de los objetivos que nos pusimos al inicio de la temporada” aseguró Lucas.

“Nos habíamos propuesto estar dentro de los diez a la hora de clasificar y eso lo logramos. Después por diferentes situaciones de carrera no nos permitió sumar fuerte” comentó Guerra.

Durante el desarrollo del torneo, el equipo alcanzó un excelente nivel. Promediando el campeonato lograron posicionarse entre los principales protagonistas al momento de clasificar. Pero esto no podían confirmarlo a la hora de las competencias finales por diferentes factores externos.

Guerra ya piensa en la próxima temporada. Hace apenas un puñado de días que terminó el campeonato y el joven piloto porteño ya fijo sus objetivos para el futuro. “Hemos trabajado mucho con el equipo y alcanzamos un gran crecimiento en lo deportivo. Ya estamos en conversaciones con Sergio Rafaelli para continuar dentro del Mida ya que ellos confiaron en mí y yo les estoy muy agradecido por eso”.

Lucas Guerra terminó el campeonato en el puesto 17 sumando 25 unidades.